NOOOOOOOOOO, me ganaste Predalien , justo hoy iva a abrir un tema similar, al menos dejo imagenes de cada felino , +1 por la rapidez
MAROZI :Teorías sobre su identidad
Dada la alta probabilidad de que nos estemos encontrando ante un enigma de carne y hueso, se han propuesto muchas teorías sobre el origen, o al menos, una explicación sobre la identidad de esta criatura felina desconocida, a continuación comentaré las más famosas:
Teoría 1- Hibridación natural entre leopardo y león.
Esta fue la primera teoría que se desarrolló. El Leopon es un híbrido obtenido de un cruzamiento entre un leopardo generalmente macho y una leona. Su aspecto es similar al de un león pero de menor tamaño, su pelaje se encuentra recubierto de manchas y poseen los machos una rala melena en la cabeza. Desde siempre solo se tiene noticias de este tipo de híbridos en cautividad, ya sean circos o zoológicos, pues el carácter de los híbridos los hace más sensibles a las condiciones del medio natural e incluso a veces sus comportamientos son contradictorios, por lo tanto y en teoría, serian poco aptos para la supervivencia. No obstante algunos investigadores propusieron en su día que algunos cruzamientos de este tipo, habrían podido suceder en la naturaleza entre leones y leopardos, ya que ambos comparten hábitat, en algunas zonas determinadas y que los individuos resultantes habrían creado una población nueva de felinos híbridos que habría conseguido salir adelante y adaptarse al medio. Esta teoría es un poco improbable, puesto que leones y leopardos son competidores directos en la naturaleza, además sus estilos de vida son muy diferentes. No obstante e imaginando que en una determinada población de leones, hubiera hembras solitarias sin machos cerca, que se encontraran con algún leopardo macho y que se diera el apareamiento entre ambos contaríamos con otra dificultad, en este caso genética. En general este tipo de híbridos no suelen ser fértiles, cierto es que en un porcentaje de ellos si que podrían serlo, pero para que una población de felinos híbridos sobreviviera, tendría que haber dado la casualidad de que se produjeran después apareamientos entre individuos fértiles.
Como podemos apreciar, seria bastante complicado que esta teoría pudiera ser la acertada.
Teoría 2- Mutación genética del león
La segunda teoría habla de una explicación genética del Marozi, como mutación del león común, similar por ejemplo a la de los famosos "leones albinos". Es cierto que los cachorros de león al nacer poseen unas manchas características reminiscencias de sus antepasados felinos manchados, y también lo es que algunos ejemplares adultos llegan a conservar unas "marcas fantasma" de estas manchas, especialmente las leonas.
También se sabe que el inbreeding, o cruzamientos consanguíneos entre ejemplares con parentesco muy cercano, puede producir coloraciones inusuales, según esto, se habrían producido una población de leones mutados genéticamente, con carácter recesivo, que conservarían dichas manchas hasta su edad adulta. Si bien esta teoría ya resulta mucho más creíble desde el punto de vista biológico, aún guarda ciertas lagunas, ya que no se explicaría como han surgido ejemplares con esta aberración genética en una zona tan determinada y no se han dado mas casos en otras zonas de África, pues en general los leones son animales adaptados a las sabanas y a los terrenos abiertos, es difícil explicar porque estos animales mutados vivirían exclusivamente en habitats de montaña según los avistamientos.
Otra laguna de esta teoría es que solo explicaría el origen de las manchas y no daría explicación al menor tamaño, ni a la escasa presencia de melena, a no ser que fueran factores genéticos ligados también a la presencia de manchas en el pelaje.
Teoría 3- Nueva especie
A mi modo de ver, esta es la teoría más probable para explicar los orígenes de este gato manchado.
Dadas las diferencias tanto en morfología como en hábitos y distribución con el resto de felinos, se ha especulado que pueda ser una nueva especie aún no catalogada de felino panterínido (perteneciente al género Panthera) bien emparentada con los leones, siendo alguna subespecie de estos, o bien siendo una especie totalmente distinta, aún por catalogar para la zoología oficial. También se ha especulado con la posibilidad de que fuera un antepasado común superviviente de la línea evolutiva que separaba leones de leopardos.
¿El fin?
No obstante y a pesar de la veracidad de las pruebas, tanta, que incluso el padre de la criptozoología Bernard Heuvelmans, acuñó un nombre científico para esta especie como Panthera Maculatus o Panthera Leo Maculatus, no se han vuelto a tener noticias de avistamientos de animales similares desde los años 30-40 por lo que algunos investigadores sostienen que si realmente este animal existió, como en un principio parece que así fue, actualmente se encontraría a priori extinguido por la presión competidora de otros depredadores de la zona, por su aislamiento y por la presión ejercida por el hombre en si hábitat. De las pruebas que recopilamos, en el Museo de Historia Natural de Londres existe aún una piel atribuida a uno de estos dos Marozis abatidos por Trent y un cráneo de estos, similar al de un león común pero de tamaño anormalmente reducido. Aún así no se han vuelto a hacer expediciones ni estudios serios para corroborar dicha hipótesis, con lo cual el enigma del "leon manchado" sigue aún sin resolver.
El Mngwa o Nunda: Un poco de historia
El testimonio del Sr. Hitchens, pudo ser quizás la primera mención al mundo europeo de algo que los nativos de Tanzania conocían desde hace varios cientos de años: El Nunda o Mngwa, el "temido" o el "extraño". Hitchens, que aparentemente es la primera fuente que cita a esta criatura destaca un antiguo proverbio de guerra Swahili escrito aproximadamente en el año 1150:
No vivo en la ciudad para no volverme perezoso;
me interno en la selva para que Mngwa me devore.
Liongo Fumo wa Ba-Uriy (1150)
Existe otra leyenda Swahili, en la que aparece mencionado el Nunda, según Edward Steere, él relató la historia del Sultán Majnun:
Según cuentan el Sultán poseía un extraño gato, el cual se escapó un día y comenzó a matar pollos. Todos los hombres del Sultán intentaron dar con él sin éxito, y el animal la emprendió contra animales de mayor tamaño como ovejas y cabras. Finalmente el desesperado sultán declaró que no era un simple gato, que era un Nunda, un "extraño" que él había capturado tiempo atrás. El hijo de Manjun se ofreció para ayudar a su padre y matar a tan devastador depredador, y siguiendo las indicaciones y las descripciones del animal mató un perro, una civeta, una cebra, una jirafa, un rinoceronte y un elefante, antes de conseguir dar con el misteriosos asesino.
Cuando por fin lo consiguió, exclamó "Este debe ser el Nunda" "Según me dijeron las orejas de este animal son pequeñas y las de este lo son, también me dijeron que era más ancho que largo y este animal lo es, me dijeron que su pelaje y manchas son similares a las de las civetas, y el de este animal lo es, por último, me dijeron que su cola era gruesa, y la cola de este animal lo es, todas las particularidades descritas están en este animal" en efecto el animal era el Nunda que fue muerto a manos del hijo del Sultán que heredó el reino y gobernó con justicia por muchos años.
Obviamente este relato no deja de ser una leyenda, pero es interesante porque ya nos habla de las tradiciones en las que estaba integrado este ser desde hace siglos, pero, volviendo al informe de Hitchens, el finalmente envió las muestras de pelos grises y negros, obtenidos en los cadáveres a la jefatura para que los identificaran. Según le comunicaron se trataba de pelos probablemente de felino.
En 1937 Hitchens volvió a escribir sobre los ataques del Nunda, que habían comenzado otra vez de manera repentina:
"No hace mucho tiempo, me trajeron un hombre cuando yo estaba en Mchinga, en una camilla, que había sido gravemente herido y mutilado por algún enorme animal. El no paraba de insistir en que el causante de su ataque había sido el Mngwa fuera de toda duda pues decía que una conocida canción típica de los rituales de antes de una cacería hablaba de Simba (el león) de Nsui (el leopardo) y del Mngwa todo en el mismo verso lo que demuestra que en Tanzania no existía ningún tipo de confusión entre estos tres grandes carnívoros que por supuesto existían realmente".
El cazador Patrick Bowen relató al autor Frank Lane, que una vez él estuvo siguiendo el rastro del Mngwa, junto con un joven ayudante nativo y otro hombre. Según afirmaba Bowen: "El rastro que estuvimos siguiendo era muy similar al de un leopardo, pero dado el aspecto de sus huellas erá más grande que un león" también declaró que:"Sus pelos, que pudimos observar a lo largo del rastro tanto en el suelo como enganchados en zarzas, eran de color grisáceo con marcas atigradas y perceptiblemente diferentes a los de un leopardo, de los cuales he cazado muchos y seguido su rastro a lo largo de mi carrera como cazador" Bowen también afirmó que era más que posible que alguno de los ataques atribuidos al Oso Nandi fueran en realidad responsabilidad del Mngwa.
Rueda de reconocimiento
Como hemos visto anteriormente los locales tienen bien claras las diferencias entre los tres grandes tipos de depredadores felinos de la zona: León, Leopardo y Mngwa. Pero ¿Cómo es este último? ¿Qué características tiene para gozar de una diferenciación tan pronunciada?
Por suerte debido a la cantidad de testigos y a la popularidad que goza este animal se tiene descripciones bastante fiables y uniformes de su apariencia.
Es un animal característicamente felino, de muy gran tamaño, se lo compara siempre aproximadamente con el de un asno, mayor que el león o el leopardo, con un pelaje grueso de color gris y atravesado por rayas negras, complementadas en la cabeza y en los cuartos traseros y espalda con manchas también de color negro, su cabeza es masiva y grande sus orejas muy cortas. A veces se describe con unos colmillos ligeramente sobresalientes de la boca, aunque no exagerados. Su cola es larga y gruesa y sus huellas como hemos visto son más similares a las del leopardo que a las del león pero más grandes que en ambos. Se ha informado de avistamientos de individuos totalmente negros (melánicos).
Teorías y candidatos
En este apartado veremos las teorías más barajadas para explicar el origen de este peligroso depredador africano:
Fase de coloración anormal en un león
Es la primera de las teorías que se barajaron, que dicho ser fuera en realidad, un león africano con una mutación genética que se expresara en forma de un patrón de coloración anormal en el pelaje, presentándose a rayas. No obstante las lagunas de esta teoría son notables, ya que por descripción, dicho animal no concuerda con un león, además como hemos visto estos depredadores estaban muy bien diferenciados entre sí.
Subespecie o mutación genética de leopardo
Otra de las teorías barajadas, es que este anima podría tratarse de un pariente cercano o incluso alguna subespecie o mutación del leopardo común pero de mayor tamaño y con un patrón de coloración diferente. Bien es cierto que por fisiología o incluso por sus huellas, su parecido con el leopardo podría ser notable, no obstante la diferencia de tamaño y comportamiento es abismal como para pensar en que tuvieran un parentesco.
Profelis Rex
Éste nombre científico es el que propuso el padre de la criptozoología Bernard Heuvelmans, para explicar la posible identidad de este misterioso gato rayado. Según los testimonios, el animal a veces ronronea mientras come, algo que los felinos mayores, del género Panthera, son incapaces de hacer por tanto, él propuso la hipótesis de que este animal sería un pariente o una forma agigantada del gato dorado africano (Profelis aurata) felino selvático poco conocido, de color rojizo o grisáceo con marcas atigradas. Por supuesto no hay ningún indicio de que haya podido darse semejante mutación o gigantismo de una especie de felino tan pequeño, pero tampoco lo hay de que no se haya podido dar.
Pariente cercano del tigre
Otra posibilidad es que el Mngwa podría ser un pariente cercano del tigre. Algunas de sus características como el tamaño y las rayas, sugieren que podría tener una conexión con al tigre. Quizás el Mngwa es una nueva, y rara subespecie africana del tigre, o una especie de evolución convergente con el tigre en otro continente distinto, que quizás esté en el medio de un proceso evolutivo de perder sus rayas. Además de explicar las rayas, esta teoría también explicaría su tamaño, puesto que los tigres son más grandes que los leopardos, y leones, así como su estilo de vida y el resto de sus características físicas similares. Me parece en el ámbito personal una buena hipótesis para evaluar el origen de este críptido.
Evolución de una criatura prehistórica
Otra teoría, de las mas recientes, propone que el Nunda pueda ser una evolución de la rama de los felinos prehistóricos conocidos como Dinofelis. Estos felinos prehistóricos se encontraban clasificados dentro de los felinos "dientes de sable", pero eran conocidos como "los falsos dientes de sable" debido a sus caninos moderadamente cortos y solo un poco sobresalientes, característica que recordemos, se ha descrito en algunos avistamientos de Mngwa esto unido a su tamaño desmesurado adaptado para cazar grandes piezas, muy típico de los felinos prehistóricos, hace que esta teoría sea una de las más convincentes.
Nueva especie no catalogada
La última de las teorías propuestas para explicar la identidad de nuestro protagonista, es que se trate de una nueva especie desconocida de felino perteneciente al género Panthera emparentado con los otros grandes felinos leones, leopardos, tigres etc... pero a la vez diferente de todos ellos y aún por catalogar oficialmente para la zoología.
De momento y hasta que no se hagan más expediciones e investigaciones seguiremos sin poder darle un origen a "El Extraño".
Ntarargo
También conocido comoNdalawo, Niarago, Ruturargo, Enturargo Entarago o Ntarago o "Wonder Leopard" es uno de los felinos criptozoológicos más desconocidos y misteriosos de los cuales se tiene noticia. A menudo se le confunde con otros como el Marozi, lo que hace realmente difícil seguir una línea de investigación, no obstante por los informes recopilados se sabe que es similar a un leopardo, si bien de tamaño algo mayor, según las descripciones proporcionadas por los nativos de las selvas de Uganda, donde habita supuestamente este felino.
Su manto esta adornado de manchas claras, pero su lomo es de color negro que va aclarándose hasta un gris ceniza en los costados, flancos y vientre. Posee una larga cola, un pelaje aparentemente espeso y garras retráctiles, lo que lo hace obviamente distinto de otros animales similares como podría ser el guepardo (en este caso su subespecie real). Por lo que parece se han registrado casos de ataques a seres humanos y los nativos de la zona lo consideran un animal peligroso, si bien se afirma que es habitualmente solitario, se han llegado a ver hasta 4 individuos cazando y colaborando, lo que indica que quizás podrían ser felinos relativamente sociables, en circunstancias determinadas, como los guepardos. Las huellas son similares a las de un leopardo pero ligeramente más grandes. Por lo que respecta a su sonido, himpla como los leopardos, pero de manera mucho más ronca y estridente, además, por lo que parece dichos sonidos tienen algún tipo de función de interacción social cuando van en grupo.
Es tan poco lo que se sabe de este ser que es difícil buscar una posible identidad, no obstante y a pesar de la confusión con otros críptidos similares, parece que al menos los locales de Uganda, lo diferencian con bastante ahínco de guepardos, leopardos y otros depredadores similares. En cuanto a las teorías sobre su origen, una de ellas defiende que el Ndalawo podría ser un leopardo, o una subespecie de leopardo, con algún tipo de pseudomelanismo, dado el color negro de la espalda y la grupa, teoría bastante lógica que, como la mayoría muestra insuficiencias, pues los leopardos no son animales en absoluto sociales, salvo la hembra con sus cachorros, o con el macho durante los días que dura su ciclo reproductivo; además como ya hemos dicho, los nativos diferencian entre estas dos clases de felinos y el tamaño de nuestro protagonista sería mayor. También se ha especulado que tras su verdadera identidad podrían esconderse hienas, pero estos animales generalmente se mueven en grupos grandes, fáciles de detectar, y muy ruidosos, raramente cazan solos, y según los testimonios de algunos aldeanos que han sufrido los ataques del Ntarargo estos se han producido en absoluto silencio y sin que nadie se diera cuenta de nada, habiendo sido la víctima característicamente arrastrada fuera de su choza, para ser alejada y devorarla con tranquilidad, en una actitud, diría yo propiamente felina. Además el patrón de color del manto de la hiena manchada, no se correspondería con el de un Niarago, así como tampoco la longitud del pelo, los sonidos que producen, ni la larga cola. Teóricamente existe una piel de este animal, aunque se desconoce donde se encuentra en la actualidad, algunos la han atribuido a un ejemplar joven de hiena manchada.
No obstante hasta que no se realicen más investigaciones de una manera seria no se podrá confirmar nada sobre la identidad real del "Wonder Leopard".
El Tigre de MontañaTambién Conocido bajo la denominación de Tigre de Montaña es otro de los felinos criptozoológicos mejor conocidos dentro de lo que cabe. Su localización es más o menos exacta y se supone que vive en una región que se extiende desde el macizo del Tibesti, en Chad, pasando por las mesetas saharianas de Ennedi, los montes del Darfur, en Sudán y del Bahr-el-Ghazal y las montañas de Uganda, hasta el monte Kenya. Coq-Ninji, Coq-Djinge, Gassingram, Koq Nindji, Vassoko, Coje-neinji, Bahaoro, Biscoro, Nisi, Noso todos estos nombres son los que designan a un fenómenos común a todas estas zonas, la supuesta existencia de un tipo de felino aparentemente desconocido y de gran tamaño que causa verdadero pavor entre los nativos de estos lugares. Fuera de confusiones con otros felinos como el león o el leopardo nuestro protagonista tiene unas características y hábitos insólitos que lo hacen radicalmente diferente a cualquiera de los felinos que hayamos analizado hasta ahora.
Y es que, podríamos estar hablando ni más ni menos que de la posible existencia hoy en día de una población remanente, o bien una evolución de los prehistóricos Machairodontinae, es decir felinos dotados de lo que se conoce popularmente como "dientes de sable", una subfamilia de Felinos de gran tamaño caracterizada por el desarrollo extremo de sus colmillos. Existen varios Géneros, pero teóricamente todos ellos extintos tras el Período Cuaternario. Según se ha podido deducir el peculiar hiperdesarrollo de sus colmillos parece una adaptación para la captura de grandes presas, tan típicas dentro de la Megafauna, existente en el Cuaternario, se cree que la técnica de caza se basaba en atrapar la garganta desde abajo y seccionarla con sus grandes colmillos, o bien seccionar los huesos de la columna vertebral, o causando grandes y profundas heridas, todo para neutralizar rápidamente a su presa, de forma mucho más rápida que si fuese por asfixia, que es la técnica que utilizan algunos de los felinos actuales, puesto que con presas de semejante tamaño, debía ser muy arriesgado utilizar un metodo como la asfixia.
Su desaparición coincidió seguramente, con cambios en la disponibilidad de presas de gran tamaño, que supondría un retroceso de sus poblaciones hacia la extinción, al ser depredadores muy especializados, de tamaño mayor que otros Félidos de menor porte y más adaptables.
Pero ¿Realmente se extinguieron todos? ¿Se perdió la característica dentadura en forma de sable en la noche de los tiempos? ... al parecer, no del todo.
¿Descripción imposible?
Todavía, y en muchas partes del mundo (por supuesto en África también) numerosos informes que indican que felinos similares, o al menos con características de estos antiguos depredadores pudieran continuar existiendo. Y entre ellos, el más conocido e importante sin duda es nuestro protagonista. Las descripciones de los nativos no dan lugar a equívoco, puesto que son bastante claras y todas coincidentes.
Estamos ante un animal de gran tamaño (mayor que un león), que posee un pelaje espeso, adaptado para la vida en las montañas, y parece ser que alrededor del cuello se acentúa formando una gorguera o melena muy típica de muchos mamíferos. Su capa es de color rojiza o castaña clara atravesada con rayas de color beige o blanquecino por todo el cuerpo, si bien, también existen otros testimonios que hablan de un animal de color sólido negro o gris-marrón muy oscuro, y es el único punto de desacuerdo en algunos avistamientos. Sus huellas son de gran tamaño pero a menudo no son nada claras, y es realmente difícil seguirle el rastro puesto que se asegura que tiene pelo entre las almohadillas plantares, y una cola de tamaño reducido, similar por las descripciones a las de un lince actual (Felis Lynx). Al parecer es un animal preferiblemente nocturno, al cual se le destaca el brillo de sus ojos en la oscuridad como antorchas encendidas, y se dice que es solitario, pues nunca se han visto más de uno juntos.
Habitualmente mora en cuevas habituales en las montañas del Chad y zonas similares y otra característica a destacar es su potente rugido, que como no, provoca el pavor en los habitantes de la zona. Además por lo que parece se alimenta de presas de gran tamaño, haciendo gala de una inusitada fuerza y ferocidad ya que alguna vez ha sido visto matando y devorando a algún Hipótrago Équino o Antílope Ruano (Hippotragus Equinus) de unos 300 kilogramos de peso. Esta especie es famosa por una inusitada agresividad a la hora de defenderse, pues luchan con bravura contra sus depredadores, sirviéndose de unas formidables defensas en forma de cuernas afiladas que superan el metro de longitud y que se encuentran curvadas hacia atrás, como una cimitarra.
Sabiendo esto, es fácil entender porqué causa ese pavor a los nativos. Pero no es, ni su fuerza, ni su ferocidad, lo que lo convierte en uno de los críptidos más conocidos y controvertidos, sin duda es, que según las descripciones de los testigos de los avistamientos, sus dos dientes caninos en su mandíbula superior se encuentran anormalmente desarrollados y sobresalen claramente de la boca en forma de afiladas dagas, con las que acuchillan a sus presas. Esto como decíamos, concuerda de manera curiosa con los supuestamente extintos Macairodontes, sospecha que se ha confirmado cuando, en algunas investigaciones se ha tratado de identificar a este ser enseñando fotos de distintos depredadores a los nativos (tanto actuales como extintos, entre ellos tigres, leones, leopardos etc...) y estos han señalado fuera de toda duda a los "dientes de sable" como "Tigres de Montagne" o Hadjeles. Otro curioso indicio recopilado de su posible existencia, fue encontrado en un lote de colmillos de elefante procedente de Kenia, en el cual había dos piezas de tamaño demasiado pequeño para ser de paquidermo, de textura y forma notablemente diferente y que a día de hoy aún no han podido ser identificadas por los zoólogos. Por si esto no fuera suficiente, tenemos otro indicio que nos lleva hasta unas cuevas del Uadi Mertoutek, en el Sahara, en las cuales encontramos representado a nuestro protagonista en diversas pinturas rupestres formando parte de la fauna local y perfectamente conocida.
Aparte de estas evidencia contamos con los testimonios de testigos de la época e investigadores, como es el caso de Christian Le Noel un famoso cazador que estuvo en la Republica Centroafricana en 1960 y que recopilo algunos informes sobre el Hadjel: Viví durante doce años en África central norteña, y llegué a conocer la flora y la fauna locales muy exactamente. Pero el animal, que los miembros del clan del Youlou describieron y que conocían bajo el nombre de Koq-Nindji, me era absolutamente desconocido. En una expedición de caza, a la que fueron invitados cazadores grandes occidentales a la región Ouanda Djailè, que conduje junto con un cazador Youlou viejo y experimentado, obstinado con estas extrañas historias, descubrí al principio de los años 60, en un barranco, una cueva oscura. Después de que la cacería fuera interrumpida de todos modos en este día, decidí dar una vuelta alrededor con algunos hombres y mirar la cueva más cerca. En el momento en que avanzamos casi al borde de la cueva, nos paramos repentinamente al escuchar un impresionante rugido, que no podría reconocer, ni asignar a ningún animal que yo conociera. Mi guía Djemet, acto seguido, se dio la vuelta realmente asustado, con una expresión en la cara que yo no había visto nunca y me dijo: ¡¡Es el tigre de las montañas mi caballero!! ¿El tigre de las montañas? Pregunté yo ¡Si mi señor es una criatura muy malévola, debemos retroceder y huir, es demasiado peligroso! ¡Estamos en su territorio! dijo él. Yo realmente desconcertado intente explicarle que no había que temer, aun así y a pesar de la potencia del armamento que llevábamos, capaz de matar a un elefante, él seguía realmente aterrorizado e insistía en que debíamos abandonar el lugar y que no pensaba avanzar mas hacia el interior de la cueva. Finalmente abandonamos el lugar, mientras él me explicaba a que se refería con el "tigre de montaña" según me dijo, era un felino depredador, algo más en grande que un león, pero un color rojizo de piel con las marcas de color claro. Según me dijo también existían ejemplares completamente negros y que la cola era substancialmente más corta que en otros felinos como el león o el leopardo. Me dijo que cuando era joven un día con su padre de caza, ellos mataron a un Hipotrago, cuando de repente aparecieron dos tigres de montaña de los cuales uno era totalmente negro. Se acercaron al antílope y uno de los dos lo aferró con sus mandíbulas y se lo llevó sin ningún problema, lejos. Poco después, mas calmados, volvimos para intentar identificar la criatura cuyo rugido nos asustó pero ya no vimos nada.
Sin embargo Christian Le Noel no pudo olvidarse tan fácilmente de esta historia y a consecuencia de ello él volvió un año después para realizar otras investigaciones a la región. Pudo hablar con algunos de los hombres más ancianos de la región, recopilando numerosa información acerca de este ser, incluida una descripción mas o menos exhaustiva:
El Koq Nindji es un poco más grande según sus descripciones, que un león. Tiene una piel roja con las rayas o las marcas blancas, la cola es corta y el pelo en las patas es inusualmente largo alrededor de sus dedos cosa que se deja ver en algunos rastros de huellas. Sin embargo ¡La característica más saliente de este animal inusual es seguramente sus caninos desmesurados!
Le Noel mostró diversos dibujos y fotografías de distintos tipos de felinos (entre ellos los dientes de sable, los leopardos, los leones, los tigres etc...) así como los patrones de colores y manchas de la piel de distintos felinos, las respuestas de los Youlous fueron claras y contundentes, identificaron a los dientes de sable en todo momento como Koq Nindji. Ya 1937 describieron en la aldea principal von Ouanda Djalé, la aldea de la patria del guarda de caza más importante de las colonias francesas, Lucien Blancou, de un animal idénticamente descrito al de la región del este de Ubangi Shari. Piel rojiza y más grande que un león y las huellas como las anteriormente descritas. Uno del poblado vio esta bestia, excepcionalmente, durante el día, cerca de las cuevas en las montañas. Durante la noche los ojos del animal brillan como linternas. El jefe de la aldea sin embargo, llamó este ser Gassingram, más tarde se supo que era otro de los nombres que recibía el mismo animal aparentemente. También recopiló testimonios en Chad, donde recibe el nombre de Hadjel, como ya sabemos: El Hadjel es un animal, que se asemeja mucho a un león, pero es claramente más fuerte sin embargo se diferencia particularmente de un león por dos factores: su cola es mucho más corta y se asemeja a la de una hiena, la otra esque sus dientes caninos son diferentes, son tan largos que sobresalen de la boca cuando el animal la tiene cerrada. Varios habitantes de Temki en las montañas de Adjéray nos confirmaron que habrían visto un Hadjel con sus propios ojos varias veces y que habrían visto en las montañas su cueva.
El León Acuático Coje Ya MeniaO así es como lo llaman los nativos, es un extraño animal desconocido centroafricano, con diversos nombres según la región: Coje Ya Menia en Angola, Mamaïmé, Muru-Ngu, Ngoroli, Nze-Ti-Ngu en República Centroafricana y Chad Gasingram, Vasoko en el Congo, Dilali en Camerún; así como Simba Ya Mai, Ntambue Ya Mai o Ntambo Wa Luy en Zaire, Ol-Maima, Dingonek en Kenia y Nyokodoing en Sudán, todos ellos vienen, más o menos, a significar lo mismo "león de agua" haciendo referencia a las características preferencias por el medio acuático de este extarño animal, el cual pertenece a algo que podriamos llamar un "fenómeno común" pues no son pocos los críptidos con características afines, descritos como enormes felinos habitantes en el agua, tanto en Sudamérica como en África.
Un retrato rupestre
Pero centrémonos en nuestro protagonista. En efecto, y a pesar de las descripciones de los indígenas testigos de sus avistamientos, la mejor prueba de cómo podría ser su aspecto físico la tenemos en algunas cuevas del Sur de África, pues aparece en numerosas representaciones pictóricas un extraño animal con aspecto felino, de color moteado oscuro y grandes colmillos como los de una morsa. También podemos complementar esta descripción, con datos facilitados por los nativos, ellos, destacan sobre todo su enorme tamaño, comparable a un mulo o un caballo, su piel moteada que a menudo produce un brillo resplandeciente cuando le da el sol (algo típico de animales con pelaje adaptado al agua) y una espesa crin en el cuello no demasiado abundante ni llamativa, pero de pelaje muy grueso. Sus extremidades son peludas, las patas son grandes y en sus enormes huellas, se marcan con fuerza los dedos, y al parecer podrían poseer membranas interdigitales que ayudarían en la natación, la cola es muy corta. Como no, la característica estrella de estos animales, vuelve a ser la presencia de unos caninos superiores desmesurados en forma de sable que llaman poderosamente la atención y que utilizan en la caza.
En cuanto a su comportamiento, se dice que vive habitualmente en parejas, que se refugia en cuevas cercanas a los cursos de agua y que tiene un potente rugido que retumba de manera escandalosa. Al parecer también es habitualmente nocturno pues sus ojos brillan en la oscuridad, una consecuencia de su adaptación. Referente a sus hábitos de caza diremos que se realizan generalmente en el agua, pudiendo matar presas de gran tamaño. Una curiosa evidencia de la existencia de esta criatura la encontramos precisamente en hipopótamos y elefantes, por ejemplo, unas de las que se dicen serian sus presas más o menos habituales. Algunos individuos en grupos familiares de esta zona muestran profundas marcas dobles paralelas en forma de heridas cicatrizadas en sus cuerpos, en los individuos machos, esto es explicable mediante las luchas interespecíficas por el territorio o las hembras, puesto que ambos animales poseen colmillos con los que se atacan entre sí, pero esto no explicaría las heridas similares encontradas en hembras e incluso crías de estos animales, que por supuesto no luchan, además a menudo estas cicatrices van acompañadas de arañazos, marcas de cuatro grandes garras paralelas, como las de las patas de los grandes felinos. Por lo que parece a veces mata a sus presas hundiéndolas o ahogándolas en el agua y que gusta de arrancar la piel para lamer la sangre de sus víctimas, no obstante tenemos algún testimonio de ello:
Marcel Halley era un famoso cazador de fauna africana en los años 20 en Gabón. Él se convirtió allí en testigo de un suceso extraño: su atención se desvió a un colector de aceite, en el cual encontró un hipopótamo hembra que fue matado y devorado por un animal desconocido, o eso parecía. El animal tenía heridas abiertas, que no podrían venir de otro hipopótamo, porque solamente los machos luchan entre ellos y sus lesiones son características y muy distintas a las que mostraba este animal. Tomó algunas fotos de ellas. Las heridas del animal no podían haber sido causadas por otro de su misma especie pues no se correspondían con las características de sus dientes. El animal tenía dos agujeros enormes, muy profundos, uno debajo del cuello y otro en el hombro. Pero no era el primer caso que recordaban similar, pues en el año 1970 testimonios hablaban de un hipopótamo que había llegado a ser muy agresivo, incluso atacó una barcaza, que transportaba a gente entre Chad y Camerún. Después de una larga búsqueda encontraron al animal y notaron que tenía las mismas heridas que había descrito Marcel Halley. Las heridas tenían el mismo tamaño y forma, por lo tanto vinieron claramente de la misma especie de animal depredador. Las heridas eran cortes profundos, como si hubieran sido hechas por una hoja de la espada. Otra herida debajo del cuello y en el hombro, era un agujero grande, en el cual según dijeron, cabía un antebrazo humano. Las heridas no habían sido producto de una infección y estaban frescas. Por el tamaño se dedujo que el animal o bien era un joven, o una hembra adulta.
Si hablamos de evidencias de la existencia de este animal, es obligado a hacer referencia a un informe militar oficial realizado en 1910 en el río Bamingui, república Centro Africana, donde una piragua conducida por un pelotón de soldados fue atacada por uno de estos animales (como ellos lo describieron un "leon de agua") con tal fuerza, que la volcó y atacó a uno de los soldados clavándoles sus mortíferos caninos y se lo llevó bajo el agua, según explicaron los supervivientes al ataque:
Del incidente en el río de Bamingui hay un testimonio escrito como hemos dicho de un europeo. En el año 1910 durante el establecimiento de una campaña dirigida por un oficial francés. Para cruzar el Bamingui era necesario reunir embarcaciones de mínimo 10 soldados cada una, es decir por lo menos 700 kilogramos de peso en cada embarcación. No obstante y bajo la mirada del oficial, que supervisó la travesía, un león del agua volcó una de las barcazas y atacó a un soldado arrastrándolo y llevándoselo con él. El oficial hizo un informe sobre el incidente, que se mantiene y guarda en los archivos militares aún hoy en día. En dicho informe también se añade que; parece ser que viven los leones del agua en las cuevas rocosas, que están en los bancos de los ríos locales. Sus ojos brillan en la noche tal como chispas y su rugido se asemeja al ruido del viento antes de una tempestad de truenos o de un tornado.
Una posible explicación
Desde luego, si bien estamos ante un animal con características casi imposibles para que se dé su existencia hoy en día, no podemos negar que existen evidencias suficientes para, por lo menos, asegurar que, algo extraño hay. Como podemos imaginar, hay teorías para todos los gustos, pero dos de ellas, con variantes, vuelven a ser las más barajadas:
Felino dientes de sable
La primera explicación, es obviamente que sea un animal emparentado y/o relacionado con el Hadjel, es decir un felino dientes de sable que o bien haya sobrevivido o bien evolucionado hasta una adaptación actual. Algunos investigadores proponen, que los "dientes de sable" se encontraron en inferioridad de condiciones en la depredación terrestre frente a los recientes y modernos félidos del género Pantera con lo cual fueron siendo desplazados hacia nichos ecológicos poco explotados por éstos, como podrían ser los acuáticos, o semi-acuáticos, a los que lograron adaptarse de manera mas o menos exitosa.
Nueva especie de felino adaptado a su hábitat
Otra variante de esta última teoría, es que se traten de felinos actuales, que igualmente se hayan adaptado a una vida semi-acuática y hayan vuelto a desarrollar estas armas en forma de sable para poder acabar con presas grandes que habitan en los ríos y sus inmediaciones. Ciertamente es una variante un poco rebuscada, pero igualmente ha de ser comentada.
Identidad de otro mamífero no felino
Esta criatura no es el único críptido, como hemos dicho, con características similares, es por ello que algunos investigadores han propuesto la teoría de que podríamos estar hablando ni más ni menos que de la existencia de Mustélidos acuáticos de gran tamaño, probablemente pertenecientes al género Lutrinae (Nutrias) que habrían asumido el papel de depredadores dominantes en los ríos y lagos de diversas zonas del mundo. Realmente tenemos evidencia fósil de que en el Cuaternario, existieron nutrias, de un tamaño realmente grande (el fémur de alguna de ellas era incluso ligeramente mayor que el de un león africano adulto) probablemente pertenecientes o emparentadas con el género Satherium, a su vez estrechamente emparentados con la Pteronura Brasiliensisactual, o nutria gigante amazónica, no obstante, contamos con dos inconvenientes. El primero es que dichos restos fósiles se han encontrado únicamente en Sudamérica, con lo cual, nada argumenta que criaturas similares existieran en África alguna vez. El segundo es que no aparece ninguna evidencia que sugiera que dichas nutrias tuvieran los característicos caninos hiperdesarrollados, como los felinos "dientes de sable" aunque tampoco seria imposible que los hubieran llegado a desarrollar, puesto que otros grupos de mamíferos placentarios y marsupiales, llegaron a desarrollarlos por convergencia (un ejemplo clásico es el marsupial extinto Thylacosmilus) simplemente si lo hicieron o no, es algo que no sabemos de momento.
CONCLUSION PERSONAL Considere solo a los felinos misteriosos, cuyas pruebas y evidencias son las mas creibles, agrege teorias y explicacion de su existencia.
En especial me gusta mas el COJE YA MENIA , pro su aspecto semiacuatico y dientes de sables. Ademas el relato de los indigenas es creible, ya q describen caracteristicas propias de un felino con esas adaptaciones( ojos brillantes, piel moteada, etc)
Es muy posible que al menos uno de estos cripitidos exista , ahy incluso pieles q pueden probar su existencia, aunque seria necesaria un especimen vivo para corrobar su existencia definitivamente, espero q al igual q el okapi o el celacante , encuentren alguno de estos gatitos y sean considerados fosiles vivientes.