Trastornos nocturnos
Estaba el otro día en Sierra de los padres y al no poderme dormir prendí la tele en un canal específico donde pasan cosas interesantes y estaban pasando un programa llamado "La Niña que Nunca Duerme".
Era sobre una niña de 3 años que desde los 11 meses se levantaba a la 1:00 am y comenzaba a jugar sobre su cama concientemente, es decir, no se lastimaría de ninguna manera.
Los padres muy asustados deciden hacerla dormir en su cama y así pasaban las noches y la niña seguía despertándose
y lo más curioso es que jugaba en un mundo imaginario donde repetía muchas cosas que había echo en el día y también jugaba con amigas imaginarias y después se lo comentaba a sus padres.
Luego de ver ese programa, el día que estuve de nuevo en Buenos Aires comencé a buscar y me aparecieron resultados sobre diferentes trastornos:
-Pesadillas-
Es muy común en la infancia que se presenten estos llamados comúnmente “malos sueños” pero hay mucho adultos que en su sueño tienen la presencia de ésta alteración en su sueño normal y que alteran su normal dormir; estoy hablando específicamente de las pesadillas y terrores nocturnos.
En el despertar luego de haber tenido una pesadilla, la persona ya sea niño o adulto se siente angustiado generalmente, acompañado esto de sudoración, palpitaciones, éste despertar ha sido brusco y sobre todo los niños refieren el temor que sienten ante los elementos que recuerdan del sueño, como así también la dificultad para conciliar el sueño nuevamente.
En el proceso del sueño se produce una modificación tanto en el contenido, como así también en las imágenes que forman los elementos que aparecen en el sueño. Se sabe que éste contenido tiene que ver con hechos ocurridos durante el día o también con preocupaciones que hay en la vida cotidiana o problemas por los que atravesamos. Cuando ese soñar, ese manifiesto en forma velada que aparece en el sueño, no tiene modo de mostrarse en forma disfrazada, cambiada, pero que tiene relación con nosotros mismos, y no pueden modificar (disfrazados) algunos aspectos pues lo que nos ocurre es demasiado emotivo, o tiene una carga particularmente traumática para nosotros, y por eso precisamente es que no es posible para nuestra psiquis encontrar elementos para éste cambio, este disfraz, es ahí cuando se producen las “pesadillas”.
Dentro de éstos sueños llamados comúnmente “malos” “feos” o científicamente llamados “parasomnias” están el sonambulismo (caminar dormido), los previamente nombrados terrores nocturnos, la somniloquia (hablar de noche dormido), el bruxismo (rechinar involuntario de los dientes) y también se considera a la enuresis nocturna (orinarse mientras se está dormido) y las pesadillas.
A las PESADILLAS entonces se las considera episodios de comportamiento que se producen o durante el sueño o en el momento del despertar.
En cuanto al pronóstico, siempre es positivo ya que si se producen en la niñez, ceden en la adolescencia. Éstas ocurren durante el REM (movimientos oculares rápidos), que es la parte del sueño en que se producen los sueños.
En los adultos suelen aparecer en cualquier momento de la vida, en cualquier edad, y a veces durante la misma noche se repiten.
Y si bien es cierto que en cuanto a las causas no existen elementos desde la genética a considerar como determinantes en la producción de pesadillas en los niños, si existen un conjunto de factores que se combinan siendo éstos:
Factores predisponentes: cuando hay antecedentes de alguna de las nombradas previamente parasomnias en cualquiera de los padres o en los dos.
Factores desencadenantes: la falta de sueño se da en forma reiterada, cuando se está cursando una enfermedad (comúnmente las que se manifiestan con estado febril), problemas en la familia, el nacimiento de un nuevo hermanito, el cambio de casa, la separación de los padres, etc.
Factores que los prolongan en el tiempo cronificándolos: cuando cualquiera de los factores previamente nombrados no se modifica y se perpetúa en el tiempo.
-Insomnio-
El insomnio es la incapacidad de dormir “una cantidad de horas regulares” o “durante éstas”. La persona que lo padece suele quejarse de que no puede conciliar el sueño cuando se acuesta, cuando lo hace ya han pasado varias horas desde que se acostó. O se acuesta en horario normal y luego de dormir un par de horas se despierta con la sensación de que ya durmió lo suficiente, mira el reloj, pero sólo han pasado dos o tres horas o menos aún, intenta dormirse nuevamente y esto le cuesta mucho llegando a hacerlo en horario cercano al que debe levantarse para hacer su obligación (trabajo, estudio, ocuparse de los chicos, casa, etc.). Y éste fenómeno se repite hasta que la persona toma conciencia de que tiene un problema y es ahí cuando consulta.
En cuanto a las causas del insomnio éstas pueden ser psicológicas, psiquiátricas, fisiológicas (la fibromialgia se asocia comúnmente al insomnio, pues quien la padece se queja frecuentemente de la dificultad para conciliar el sueño, por la intensa sensación de molestia y dolor que le produce la misma enfermedad) y en otros casos por el uso de medicamentos. Aquí nos ocuparemos de las causas psicológicas.
El insomnio es la alteración del sueño, y es el motivo más común por lo que esta alteración se produce. En cuanto a las causas psicológicas que lo producen pueden ser: el estrés, las dificultades personales (problemas familiares, de trabajo, sociales, académicos, etc.), la depresión, la ansiedad, la anorexia o cualquier otro trastorno psicológico. También el consumo de ciertos medicamentos como los psicoestimulantes, los antidepresivos, y también los corticoides. También puede haber causas orgánicas como una enfermedad crónica, o el dolor producido por un trauma u otro tipo de origen: es muy conocido el impedimento del sueño que produce un dolor de muelas o de oído).
Cuando una persona que padece de insomnio me consulta, se me hace necesario hacerle una serie de preguntas relacionadas con el horario en que se acuesta y también su horario de levantarse (muchas personas sienten dificultad para conciliar el sueño, pero han realizado una siesta pocas horas antes, o se han levantado muy tarde a la mañana, o hay quienes no tienen una regularidad en cuanto al horario de irse a la cama), lo previo debe ser modificado en la medida de lo posible (levantarse más temprano, no dormir siesta de ser posible, y si se siente realmente cansado, dormir un corto tiempo y no cercano al horario de la noche), también se aconseja no cenar en forma demasiado abundante aunque sí comer alimentos que contengan proteínas; si realiza actividad física que ésta no sea hecha en hora muy cercana a la actividad del dormir, pues esto hace que la persona se active y luego le cueste conciliar el sueño.
Entonces quien padece de insomnio frecuentemente se queja de:
* le cuesta conciliar el sueño.
* comúnmente durante la noche se despierta, y luego no vuelve a dormirse hasta bien cercano el horario en que debe levantarse para su actividad diaria.
* en otros casos, se despierta ya cercano a la mañana, pero más temprano de lo que debiera ser, generalmente un par de horas y no vuelve a dormirse.
* suele narrar que a veces siente que está dormido, pero su sueño no es precisamente profundo o reparador, y luego a la mañana no tiene la sensación de haber descansado, sino todo lo contrario.
Entonces si nos llevamos por lo que quienes padecen de insomnio nos cuentan, podemos decir que el Insomnio es la percepción de la persona de tener un sueño insuficiente o lo que manifiesta como incapacidad para dormir.
El insomnio es:
* ocasional o transitorio cuando tiene una reiteración que va de una a varias noches.
* De corta duración o agudo cuando no llega a tres semanas, y
* crónico cuando supera las tres semanas.
CAUSAS DEL INSOMNIO
El insomnio se puede producir por motivos de envejecimiento:
* Cuando la persona envejece tiene una reducción del tiempo total del sueño
* La eficacia de éste sueño no es la misma
* Se despierta más veces por la noche
* Manifiesta durante el día somnolencia
* En el anciano también se puede comprobar que tiene mayor frecuencia y duración de los períodos de vigilia
* La Fase REM es estable
* La fase no REM (sueño profundo) con el envejecimiento disminuye progresivamente
* Por eso es que los ancianos tienen un sueño menos reparador
* Sus vigilias son más frecuentes y prolongadas
* Su sueño nocturno es más liviano.
-Despertar a Media Noche-
Si se produce de manera ocasional, no constituye ningún problema; sí lo será en el momento en que se convierta en un hábito.
El bebé que se despierta a medianoche porque está mojado, tiene hambre o le duele algo no se le puede, en absoluto, ignorar y habrá que proceder como convenga.
Si el niño es ya mayor deberá observarse el motivo que siempre envuelve a esas interrupciones del sueño (a quién llama, qué pide, respuestas que obtiene,...), y con esta información establecer un plan que podrán establecer los propios padres o con ayuda del especialista infantil.
-Sonambulismo-
El niño, sin despertarse, se levanta de la cama y deambula por la casa.
Se trata de una alteración del sueño, donde los mecanismos encargados de la relajación y la inmovilidad que, normalmente, se produce durante el sueño, son inmaduros y no actúan.
Suele mejorar espontáneamente, aunque cabe la posibilidad de tratamiento médico.
-Hipersomnia-
Es la tendencia a dormirse durante todo el día.
Habrá que descartar en primer lugar, si alguna medicación pudiera estar provocando este trastorno,y consultar por ello al especialista.