Primer post que escribo, veamos que sucede:
Venia yo de vuelta del colegio, con dirección a mi departamento, la verdad es que en mi departamento rara vez funciona el ascensor y yo vivo solo en el tercer piso, asi que sin ni siquiera apretar el botón del ascensor decidí subir las escaleras, en términos generales, todos los que viven en ese departamento son personas entradas en edad, que nunca hacen mucho ruido y que rara vez suben o bajan por las escaleras, por lo que cuesta encontrarse con alguno en ellas, subía con tranquilidad hasta que escuche unos pasos que venían del subterráneo, no soy muy curioso y tengo que admitirlo, soy miedoso, pero no se que me dio por bajar (por supuesto terrible error).
Baje del primer piso al subterráneo que no es mas que un pasillo con conjunto de bodegas en las paredes, nada sorprendente, prendí el foco que ilumina la habitación, gracias a la luz me di cuenta de que una de las puertas estaba abierta, fui a ver si había alguien, porque en caso contrario tendría que avisarle a los de administración, al llegar a la puerta y ver dentro de esta (yo creyendo que era una bodega como las demás) adivinaran mi sorpresa cuando descubro que da a unas escaleras que siguen bajando, yo viví desde que tengo memoria en ese edificio y no recuerdo haber visto esa escalera antes, decidí bajar, en medio de las escaleras siento el sonido de la puerta cerrándose, quede helado, una ampolleta roja se prendió sobre mi cabeza, volví a subir las escaleras para volver por donde llegue, la puerta no se abría, era sin lugar a dudas el peor momento de mi vida, mi corazón se acelero, empece a sudar y con una determinación que no tengo idea de donde salio, comencé a bajar por las escaleras, cuando pise el ultimo escalón, una luz roja se poso en casi toda la habitación que había frente a mi, no era mas que una habitación grande, con una mesa redonda y 2 sillas, unos pasos sonaron en la parte oscura del lugar y una persona con gabardina y sombrero salio de la oscuridad para sentarse en la silla mas próxima a el, indicando mi mochila (que todavía llevaba en la espalda y que no tenia nada mas que unos cuantos libros cuadernos) hizo un gesto para que la dejara en un colgador a mi lado que no había visto, no coloque mi mochila en la percha, si no que la toma con mi mano derecha y la sostuve, desafiante, el individuo levanto los hombre en señal de desinterés e indico la silla frente a el, ni por todo lo que existe me habría sentado en esa silla, pero algo me hizo caminar y sentarme en ella, soltando mi mochila y dejándola caer al lado de la silla, luego de sentarme el sujeto levanto los brazos para remangarse y poner suavemente sus manos sobre la mesa, eran de un color rojo sangre, con muchos cortes y cicatrices algunas se veían mas nuevas que otras y solo me miro, no había sacado la vista de sus manos, pero cuando veo sus ojos quedo paralizado completamente, era como 2 focos de luz roja, no veía nada que se le pareciera un ojo, eran 2 esferas que creaban su propia luz, no me podía mover, en ese instante el desconocido saco lentamente de su gabardina un cuchillo largo y afilado, el cual puso en la pesa, tomo mi cabeza con sus manos y me hizo bajarla, para que pudiera ver el cuchillo, su piel era rasposas, congeladas como el hielo y ahí quede yo, viendo el cuchillo, sin poder moverme, luego bajo sus manos y los puso al lado del cuchillo para que las pudiera ver y delicadamente con la mano izquierda tomo el cuchillo y se hizo un corte en la mano derecha, no emitió sonido alguno en ningún momento, pero yo no pude guardar el grito de dolor, sentía como si el cuchillo me estuviera atravesando a mi, sentía el dolor latente en mi mano, luego cambio el cuchillo de mano e hizo el mismo procedimiento, mismo resultado, un alarido se escapo de mi garganta, era horrible, luego con una voz áspera y fría comenzó a reír, cuando comenzó a reír, pude moverme, me levante de la silla y salí corriendo en dirección a la escalera, el ente no paraba de reír, cuando puse un pie en la escalera un dolor enorme me atravesó el cuerpo, era tan fuerte que caí al piso. al voltearme vi como el sujeto tenia el cuchillo en la pierna, ahora reía con mas fuerza, yo no daba mas, el desgraciado se levanto lentamente, tomo el cuchillo de su pierna y caminando lentamente se acerco a mi, había dejado de reír y yo volví a estar paralizado, cuando estuvo en frente de mi, se inclino hacia mi oreja y sentí el pútrido aliento del muy maldito:
-Aquí se acaba todo- Dijo lentamente- Puede que creas que es solo un sueño, es mas piensas que si cierras los ojos todo acabara, que error mas grande.
Tomo el cuchillo y se lo clavo en la cabeza, el resto fue blanco.
De la nada siento que alguien me mueve, obviamente me sacudo salvajemente y siento una voz que me dice:
-Hey chico- Era una persona mayor, la reconocí inmediatamente era la voz de mi vecino- ¿Que hacer votado aquí?
No sabia que responder ante mi solo estaba la misma puerta donde estaban las escaleras, pero cerrada, aun se veía una luz roja filtrada por el espacio de la puerta, decidí irme de ahí regresar a mi casa y olvidarme de todo. La verdad es que aun en sueños (o lo que yo creo que son sueños) escucho las mismas palabras que me dijo ese sujeto de la gabardina, luego de eso, una risa escalofriante y un dolor que sobrepasa lo imaginable, me cambie de casa, pero aun tengo ere horrible recuerdo, nunca mas bajare a un sótano en mi vida.
Tema: La puerta desconocida 
Vie Sep 09, 2011 2:36 am
