Mi vida apesta. Tengo 22 años y mi único trabajo ha sido trabajar en un restaurante de comida rápida, donde mi compañero de trabajo me odia por completo. Mis únicos 2 amigos son una chica norteña que me gusta y un chico que solo está conmigo porque es retrasado mental. Tengo que conducir una fea bicicleta a mi trabajo porque nunca puedo conseguir mi licencia. Mis padres me abandonaron cuando era joven, y lo peor de todo, es que vivo en una piña.