Horrible transformaciòn (fic de Dib) Perdón si los hice esperar por la continuación.

que Dib se encuentre con Zim y lo agarre y diga "¡Tu me hiciste esto!", como pasó en Mortadelus Maximus, pero Zim huya... luego su transformación se completa.. y los más altos lo confundan con un invasor, o bien, con Zim.

Unos días después....
Hora:5:42 am
Lugar:Una pequeña casa verde en el centro.

En el sótano secreto, Zim estaba sentado junto a los controles, con la cabeza apoyada en las manos. No sabía que hacer con tantos problemas. Varias piezas de maquinaria de la base estaban dañadas. Los altos se negaban a enviarle refacciones. Y también estaba ese problema de Dib, ese problema. Todo por culpa de ese estúpido robot. A veces quisiera que simplemente no le hubieran dado ese "ayudante"

Estando a la mitad de esas profundas reflexiones una alarma lo interrumpió.

"ALERTA, INTRUSO DETECTADO, INTRUSO DETECTADO"

-GIR!

El pequño robot entró en la habitación.

-¿No te dije que activaras los gnomos para evitar que alguien entrara?

-Si, jefecito

-¿Por que no lo hiciste?

-Estaba cenando con cerdo.

-¿¿¿QUE???...... ¿Sabes que? trataré de ignorarlo POR ESTA VEZ ¿ENTENDISTE?

Dicho esto el hombrecillo verde se dirigió al cuarto de control donde activó el sitema de defensa para capturar al individuo.

Solo quedaba esperar. Esa monótona espera no había salido de esa base en días. Ya estaba cansado de eso. Todos los días sintonizar todos los noticieros, esperando tener algo de suerte para que alguien hubiera descubierto el paradero de Dib para poder ir a buscarlo, terminar lo que empezó hace mucho. Todavía el recuerdo de esa noche, esa noche que se perdía en sus recuerdos, volvía de vez en cuando, la noche cuando empezó todo este asunto de Dib.

De repente se dio cuenta de que la espera ya había terminado. La base había capturado al intruso.

-Computasora, trae al intruso acá!

-Enseguida, amo.

Por una escotilla Zim y su pequeño ayudante vieron entrar un joven, al que Gir reconoció apenas verlo.

-Es el tipo de las pizzas! Por favor , amo, no experimente con él.

El chico de las pizzas estaba sedado, por lo cual no se percataba de la situacióm.

-No, Gir, no experimentaré con él.

-Que bien!

-Gir, analizando tu comportamiento últimamente decidí que necesitas algo de disciplina. Empezaremos con una prueba fáciul. Este espécimen no me sirve para nada, quiero que lo elimines- Dijo sacando un cuchillo ensangretado.

El pequeño robot recibió el cuchillo, todavía sin entender lo que su amo estaba diciendo.

-Anda, mátalo, ¡HAZLO!

Gir por fín se percató de lo que Zim le estaba obligano a hacer.

-No puedo, amo. Hemos pasado buenos momentos juntos, no puedo.

-¡HAZLO!

-NO

-¡HAZLO! ¡YA!

El pequeño robot se acercó al chico con el cuchillo en la mano y los ojos cerrados. No podía creer lo que estaba a punto de hacer. De repente se paró en seco, con el cuchillo a unos escasos centímetros del muchacho.
Dejó caer el cuchillo al piso.

-No lo haré, amo.

-¿TE ATREVES A REBELARTE CONTRA TU LIDER?
En un ataque de ira, Zim arrojó al robtito contra la pared, y empezó a golpearlo salvajemente. Lo destruyó, lo convirtió solo en un montón de escombros, un montón de escombros que alguna vez había sido su acompañante incondicional. Unos segundos después, Zim seguía ahí, inmovil, sin terminar de creerse lo que acababa de hacer. De repente ampezó a llorar descnzoladamente.

-¿Que he hecho, que es lo que he hecho? ¡Soy un monstruo! ¡Era mi único amigo!

De repente volvió la cabeza. El prisionero ya había recuperado la conciencia y llevaba cierto tiempo observándolo, confundido.

-EY ¿TU QUE ESTÁS MIRANDO? - Grito Zim, recogiendo el cuchillo del suelo y acercándose peligrosamente al prisionero.

Mientras todo eso pasaba, Dib despertaba en un bote de basura cerca al mercado de la ciudad.
Lo habían despertado unas horribles ganas de vomitar.
Salió del bote de basura. Ya estaba bastante acostumbrado a eso. Todos los días se despertaba por esas horribles náuseas.
Vomító, apoyado en una pared. Miró su vómito. Todos los días vomitaba un órgano diferente, ya no los necesitaba. Esta vez era su hígado. Cada vez estaba más deprimido.

Odiaba todo ese montón de porquería que llamaba "vida"
Solo quería ir a buscar a Zim, obligarlo a revertir eso. Qeuría volver a ser normal, o al menos lo que él consideraba "normal" para sí mismo.

Pero...

Seguro ustedes, queridos lectores se preguntarán ¿POR QUE MIERDA NO LO HACÍA?¿POR QUE MIERDA NO BUSCABA A ZIM DE UNA VEZ?

Bien niños, pues se los explicaré de una forma que puedan entender:

Había una vez unos agentes del FBI que sospechaban que Dib volvería a su casa tarde o temprano. Por lo tanto tenía todo el barrio de Dib vigilado las 24 horas del día para atraparlo en cuanto se acercara.

Bien, resulta que las casas de Dib y de Zim quedan en el mismo barrio, así que también tenían vigilada la casa de Zim. POR SI NO ENTENDIERON: ¡¡¡¡SI DIB VA A LA CASA DE ZIM ESTÁ MUERTO!!!!!!!!

Espero que hayan entendido, niños. Ahora sigamos con la historia

Ahora necesitaba comida. Maldecía esa necesidad de su cuerpo de estar pidiendo comida todos los días. Ya la comida humana no le satisfacía, le hacía daño. Sin embargo si le satisfacía COMER CARNE HUMANA.

Sabía de un puesto de la mafia en el mercado negro donde vendían la carne de sus víctimas como "carne 100% de res". Era uno de sus mayores clientes. Pero primero necesitaba dinero.

Entró al mercado negor. Con suerte podría robar suficiente para alimento para unos días más.

Se mezcló en una multitud, sacando la billetera del pantalón de un tipo, vaciándola en su mano y volviéndola a poner donde estaba.

-Oh, ¿pero que es esto?- Dijo viendo en el bolsillo de un tipo de aspecto bastante rudo una navaja suiza. La sacó con un hábil movimiento. Luego salió corriendo. Ya tenía bastante experiencia en este tipo de cosas.

Se adentró en el mercado negro hasta el local de la mafia.

-¿Lo de siempre?- Dijo el dependiente, bastante acostumbrado a ver esa figura delgada que nunca dejaba ver su rostro.

-Si, lo de siempre

Cuando, le entregaron las bolsas con la carne, Dib se dispuso a volver al basurero y devorar el contenido de la bolsa que llevaba en la mano, cuando algo lo detuvo.

-Hey, es el Feliz Niño Fideo¹ -dijo, deteníendose en frente de una Tv que estaba en un local cercano. Precisamente esa fue su perdición.

De repente apareció un boletín de noticias:

"Interrumpimos este programa para dar un informe especial.
Se ha hecho todo lo posible para dar con el paradero de Dib membrana, el fugitivo. Sin embargo todos los intentos han sido infructuosos.
Se recomienda a los ciudadanos que puedan saber algo que informen a las autoridades. Recordamos que la última vez fue visto usando una capucha gris, una bufanda azul y unos jeans negros en McBurguesas......"

Dib se miró. Tenía exactamente esa ropa puesta. Todo el mundo lo estaba mirando. Lo único que acertó a decir fue:

-MIERDA

1- En mi fic Happy Noodle Boy es un programa de TV XP

Zim miraba la televisión en silencio en su base. Tenía que saber por donde empezar a buscar. Siempre revisaba los noticieros eperando tener una pista.

Ese día, después de ese desafortunado incidente con GIR, estaba mirando la TV. Tal vez el feliz niño fideo lograra distraerlo de sus preocupaciones, del dolor de haber perdido a su único amigo, del cansancio de bucar a Dib sin encontrarlo. Tal vez lograra distraerlo de su vida y del mundo.

No funcionó.

Estaba a punto de apagar la TV cuando

"Interrumpimos este programa para dar un informe especial.
Se ha hecho todo lo posible para dar con el paradero de Dib membrana, el fugitivo. Sin embargo todos los intentos han sido infructuosos.
Se recomienda a los ciudadanos que puedan saber algo que informen a las autoridades. Recordamos que la última vez fue visto usando una capucha gris, una bufanda azul y unos jeans negros en McBurguesas......"

-Ajá! GIR, ponte tu disfraz, vamos a salir!!! ¿GIR? - Dijo, luego cayó en cuenta de lo que acababa de decir - GIR!! ¿Por que? ¿Por que? - Dijo casi llorando

-Tu eras mi compañero - Dijo luego de unos minutos dirigiéndose al montón de escombros que había junto a él - Pero no debo dejar que esto obstaculize la misión. Adiós, amigo

Acto seguido pusó un cerdito de caucho encima de el montón de escombros. Ese cerdito de caucho que aahora le traía tantos recuerdos. Lleno de nostalgia, se sentó a llorar al lado.

Luego se levantó y se dispuso a ponerse su disfraz.

Por costumbre, recogió una correa de perrito de la mesa, como cada vez que salia con GIR. Al darse cuenta fue más dificil contener las lágrimas.

Se encaminó a McBurguesas. Con algo de suerte alguién allí podría darle una pista sobre el paradero de Dib.

En otro lugar.

Dib despertó amarrado a una silla. No recordaba mucho.
Después de ver el informe especial se dispuso a salir corriendo antes de que alguien lo notara. Chocó con un hombre, lo cual hizó que se cayera su capucha y todos lo vieran. El hombre lo agarró y no recordó nada más.

De la habitación de al lado llegaban los ruidos de una TV. Alcanzó a reconocer la música de los créditos de "Wobbly Headed Bob" (si, en mi fic también es un programa de TV). Seguía después de el feliz niño fideo así que no podía haber pasado mucho tiempo.

De repente oyó voces en la habitación del lado.

-Tienes que entender que es solo un cico. No puede tener más de 14 años.

-Si, pero hay un precio por él. Si lo entregamos podremos volvernos muy ricos y huir de esta mugrosa ciudad.

-Pero le harán cosas horribles.

-¿Y que? ¿Sientes compasión de él? Somos muy buscados aquí. Ese chico podría ser nuestra única forma de escapar. Pero a tí te da un puto atacque de moral, ¿cierto?

- Para empezar....

-Nunca estás de acuerdo con nada.

Aunque Dib no entendía mucho, esntendía lo suficiente para sabe una casa: debía escapar de ahí.