The Frontiers [PRIVADO YSY-Evil-perro-House]

Antes de volver gasto todo lo que pudo en comida y bebida antes de volver, no encontraria comida asi en toda la Universal, o al menos no a un precio justo.

Luego se deshizo de la targeta, a esas alturas ya pronto seria detectada por la cantidad de gastos, que tuvieran suerte encontrandola en el basurero.

Las noticias empezaron a llegarle, la fotografia de su beso con Geraldine, aunque para su suerte no se le veia claramente el rostro, y si se inventaba una buena coartada jamas sospecharian de él.

Ya habían pasado horas desde que el reloj digital había marcado las doce de la noche.

A pesar de su extrema frialdad para ejecutar su trabajo, él tenía preocupaciones como cualquier otra persona. La ronda de trabajo se había extendido considerablemente, contrariamente a lo que pensó: que le iba a llevar menos tiempo; fue ingenuo. Volver a casa para ver a la única persona que amaba en el mundo fue la mejor decisión.

Si bien su trabajo consistía en cazar a la presa, a veces el tema no era solo matarla, sino también hacer un poco de espionaje. El tema es que esta vez no sabía quién era la presa. Las órdenes de los de arriba solo le indicaron que era alguien que había robado información confidencial. Nunca le dijeron como lo notaron y cómo es que habían conseguido esos archivos clasificados. Solo le explicaron la situación muy por encima: algo gordo debía ser. Aun así, él solo era obediente por esa causa porque necesitaba el dinero para seguir pagando el colegio privado de su hermana, la hipoteca del departamento, la membrecía del fanclub oficial de Geraldine y una comida digna para una princesa como lo era Ornella. Hacer preguntas no era una opción, es más, era algo innecesario.

Era obvio que quien había robado esa información era alguien de adentro, con, tal vez, ayuda de alguien de afuera. O eso supuso, tonto no era.
Por medio de un par de contactos, consiguió los datos personales de varios militares con gran rango, pues empezaría desde allí. Los del gobierno y mucho menos la milicia le proporcionaría esa información, pero si querían que cumpliera con su trabajo, debía mover los hilos a su manera.

Antes de las doce de la noche, se encontraba vigilando a uno de ellos. Investigar a todos le llevaría un buen tiempo. Igual iría descartando opciones según el historial y los pasos que estos dieran, en su carrera o vida diaria.

Una vez que el tipo se fue a dormir, se fue de allí.

Antes de llegar al departamento, del bolsillo interno de su tapado sacó una bolsita de regalo pequeña y brillosa, con moño y todo, que contenía la entrada al concierto de Geraldine. Su hermana admiraba con locura a esa mujer y era lo menos que podía hacer después de que ella estuviese en vela, esperándolo, hasta quedarse dormida en lugares inauditos del hogar.

Suspiró, subió en el ascensor para ser menos ruidoso y al llegar a su piso, abrió la puerta de su hogar. Y sí, allí estaba, su hermana dormida encima de la mesa con todo preparado para cenar.

La alzó en brazos y llevó a la habitación. Tenía el sueño muy pesado. No despertaría hasta el día siguiente.
Dejó la entrada en la mesa de luz.

Al día siguiente, debía levantarse temprano otra vez para trabajar. No la vería en todo el día otra vez, era muy probable. Capaz tampoco él dormiría. Por lo menos trataría de llevarla la tarde del concierto.

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Vanderveer estaba desconcertado por el diseño de la nueva muestra. Era algo de otro mundo, aun siendo su material lo más común del mundo en la informática de la época.
Se había comido el coco tratando de descifrar cómo funcionaba, pero la cosa no tenía ni pies ni cabeza. No tenía idea de qué carajo intentaban hacer con esa cosa, pues veía que no solo sería una actualización para tenerlos controlados como a perritos, sino que presentía que eso era una prueba de que había algo más y que probablemente era algo experimental para después dar un paso más allá.
Encima, esa mierda tenía fragmentos de una piedra no identificada. La buscó entre sus datos, en su memoria y no había nada. Cero. Seguramente todo partiría desde esa piedra, esa fue su suposición.

Ya era de madrugada y pronto serían las seis de la mañana. Tenía que dormir si quería pensar claramente.

Al dia siguiente, despues de volver a la Universal la rutina siguio a como lq habia dejado, con la diferencia de que ahora haria vuelos de vez en cuando, ese dia habia tenido un encargo de escolta, un corto viaje a una de las naves secundarias de la flota, mas concretamente a una de las naves refineria.

Conocidas vulgarmente como "devoradoras de asteroides" estas naves cumplian la funcion de explotar satelites ricos en minerales, refinarlos y enviarlos a la nave principal. La tarea de Sven era solo pilotear el carguero y llevarlo seguro hasta la Universal.

El trabajo fue simple, salvo por un pequeño percance a la hora de descargar cuando una de las gruas que descargaban los contenedores tuvo una falla y dejo caer el mineral, dejando que una pequeña piedrita color ambar botara hasta los pies de Sven.

El material era completamente desconocido, nunca habia visyo algo similar y se notaba por ese brillo propio que era algo mas que una simple piedra.

La tomo rapido antes de que alguien la viera, y la guardo en su bolsillo.

Mas tarde al haberse desocupado fue a ver a Val, no le habia llamado desde que le dejo la informacion, quizas habia descubierto algo y no le habia avisado, fue como de costumbre en su traje espacial hasta su puerta y toco tres veces.

Estaba durmiendo en su silla. Tenía la mala costumbre de hacerlo sentado, como si jamás se relajara y no supiera lo que era eso. Estar acostado no era una opción: se estaría revolcando toda la noche, pensando y pensando. En cambio, la silla no le permitía eso. Era lo suficientemente incómoda como para no estar como en la cama, pero cómoda como para dormir.

Lo despertó el sonido de la puerta. Se fijó la imagen de las cámaras.

— ¡TU!— Exclamó— Suertudo de mierda. Pasa de una vez.

Se despabiló por completo y dejó que la puerta se abriera.

—Todo el jodido internet está hablando de eso. Ni yo estando en el FC y yendo a los conciertos tuve esa oportunidad, siquiera de acercarme por lo menos un metro. — Rascó su cabeza.

-Supongo que la fotografía se hizo viral... eso explica por que la gente se me quedaba viendo.-

Se metió dentro del departamento y busco su asiento habitual.

-Si te contara lo que paso después te pondrías verde de la envidia... así que por tu bien mantendré los detalles en secreto- Se estaba burlando descaradamente de él, solo por hacer la gracia, luego recordó a que había venido.

-Supongo que aun no haz descubierto nada del material que te traje-

— ¿Fotografía? ¡PFFFF! Querrás decir fotografías. Y videos. En menos de una hora los portales explotaban de ese contenido. Ahora ya cantaste, así que no me dejes picando y cuéntalo después.

Se acercó a la muestra y se la quedó viendo, frustrado.

— ¿Me creerías si te dijera que no entendí ni jota de cómo diablos está hecho esto? Encima tiene un material que nunca vi antes, ni tampoco hay registros de su existencia, siquiera sé para qué sirve: es la piedra que tiene en el medio. No quise extraer ni un solo pedazo por el momento, no hasta tener otra réplica de esto. Es obvio que cumple una función importante, así que deberé centrarme en la piedra y mandar a estudiar su composición… el tema es que por más que tenga otra muestra, estuve averiguando y no hay registros de ella, y si la mando a estudiar y resulta ser una curiosidad, puede que todo se me vaya de las manos y la información llegue a oídos no deseados.

Suspiró.

—Tengo que confesar que estoy paranoico.

-Pues si te sirve de consuelo... siempre he pensado que estas algo loco.- Vio a su alrededor la cantidad de cacharros que tenia por todo el lugar, todo completamente desordenado a excepción de la cama, que parecía que nadie había dormido ahí en semanas.

-Cuantos días llevas durmiendo en esa silla?-

Se levanto del sillón y fue a ver el dispositivo abierto sobre la mesa de trabajo, la piedra que tenia dentro era igual a la que habia recogido hace unas horas.

—Bueno, eso lo dice todo— Estiró las piernas— Casi siempre duermo en la silla. La cama solo sirve para pensar… y traer chicas. Pero un Geek como yo es malísimo en eso.

Se llevó las manos detrás de la cabeza.
Luego se tocó el arito de metal que traía en la oreja. Suspiró.

-Supongo que si no sales de este lugar de vez en cuando no vas a conseguir una nunca...-

Saco la piedra de su bolsillo, y la comparo con la otra, sin duda eran iguales.

-Esto me recuerda a algo- Saco la cadena que llevaba sobre el cuello, en donde tenia el arete de Geraldine, lo desengancho y se lo mostró a Van. -Lo reconoces?- Le pregunto alardeando.

—Meh— Hizo un movimiento con la mano. Las chicas le encantaban, pero no le atraía ninguna por la personalidad. Generalmente eran frías y muy distantes en la flota. Y esa actitud despreciativa le reventaba.

Cuando le habló de nuevo, dirigió la vista hacia el arete. Entrecerró los ojos con exageración y arrimó el rostro. Luego puso una cara de monumental sorpresa y pegó un salto de la silla.

— ¡Diantres! Eso es… ¿Se lo robaste? ¿Te lo dio?
>>Todos los fans sabemos que ese arete con ese cuarzo tan extraño es la posesión más preciada de ella. En una entrevista dijo que son su amuleto de la suerte y que intensifica su canto. Y que sería capaz de cortarle la mano a cualquiera que intente ponerle un dedo encima.
>>También se rumorea cosas con respecto a ellos. Pero tienen que ver más con su vida personal. Y son solo eso, especulaciones.

-Claro que no se lo robe, me lo dio y me dijo que vendría luego a buscarlo cuando estuviera en la universal... oh si, vendrá un par de días y tal vez la convenza de que se quede conmigo... eso me recuerda que tengo que comprar sabanas nuevas, no he estado en mi departamento de civil en casi dos meses-

Junto la piedra con la misma mano con la que sostenía el arete, sin darse cuenta de que al entrar en contacto la piedra color ámbar cambio de color súbitamente al contacto.

-Ademas de que...- Sintió que algo se calentaba en su mano, abrió la palma y la pequeña piedra ahora estaba roja y brillaba intensamente, la dejo caer la suelo y esta empezó a echar humo para luego incendiarse y chispear de forma descontrolada.

Al cabo de unos segundos la llamarada desapareció, dejando solo un agujero enorme en el suelo.

-Mierda!- Exclamo. Miro fijamente el cuarzo del arete, que para su suerte estaba intacto, salvo por un pequeño resplandor que desapareció fugazmente.

—Entonces sí pasó algo más, pillín — Omitió la parte en que planeaba intervenir las cámaras del hotel donde se alojara la diva para espiarla. Ahora sabía que no debía hacerlo, tan HDP no era— ¿Quedarse contigo? No es por ser negativo, pero debes recordar que como ser de carne y hueso completamente, dudo que pueda vivir en esta flota sin estar con pulmonía o intoxicada cada dos por tres. Nosotros porque estamos modificados y por ende somos resistentes, algunas cosas siquiera nos afectan.

Estaba de espaldas cuando decía todo eso, solo cuando escuchó el chispazo se dio vuelta de nuevo. Ni se molestó por lo del suelo.

—Joder… el vecino de abajo se enojará.

-Que se joda el vecino!- Dijo exaltado -No te das cuenta?! eso es lo que planean meternos dentro de la cabeza!-

Tomo la otra piedra, la que estaba dentro del dispositivo.

-Esto no es solamente un rastreador, es una bomba para freírnos el cerebro... esto va mas aya de simple control,con esto pueden tenernos sumisos o ejecutarnos si oponemos resistencia!-

Se dejo caer de espaldas contra el sillón, el cual hizo un enorme crujido. Se puso las palmas contra las cienes y se quedo pensando un momento.

Alzó una ceja.

—No te adelantes tanto. Puede que sea así, pero vamos a ver cuánto les dura… Si esta cosa fríe el cerebro, es probable que haya personas que no lo toleren y se terminen muriendo, en el peor de los casos. Creo que más bien están probando su nuevo producto masivamente. Experimentando, más bien, como lo digo yo. Estoy seguro de que hay algo más que simplemente rastrearnos.

-No lo se, he escuchado rumores-

>>Hay gente que dice que los de arriba están planeando algo muy serio, hay una producción desmedida de armamento... personas desapareciendo de un día para otro, y esas malditas maquinas que son mas metal que humano... viejo, esas cosas me dan escalofríos cuando me miran... el otro día una estaba haciendo guardia fuera del bloque de mantenimiento, cuando pase por un lado pude ver que le salia algo parecido a saliva por debajo del casco... y por un momento casi escuche como si la persona que estuviera dentro pidiera ayuda, pero me aparto de un empujón.

El solo recordarlo le ponía la piel de gallina.

-Le he pensado mucho... creo que lo mejor que podemos hacer es tratar de quitarnos los rastreadores que ya tenemos antes de que nos implanten los otros... y escapar a la Génesis.-

—Sí, no sería problema quitarnos los rastreadores… si no los tuviéramos en el cerebro. Ya sabes que implantártelo ya de por sí es riesgoso, imagínate sacarlos. Estas basuras están prendidas como garrapatas en el tejido cerebral y echan pequeñas raíces que se adentran a través del mismo.
>>No es como los antecesores a esta mierda, que te los ponían en la muñeca. Después fue a los costados del cuello, en la parte baja del cráneo, en la cervical. Y en nuestra época en el cerebro…
>>¿Escapar a la Génesis? Allí nos verían como fenómenos. Si es que no lo hacen ya. Incluso en otras Torii comentan lo peligrosos que seríamos para su seguridad... Aparte ya viajar por turismo es cosa casi imposible.

-Entonces sin sacarlos... solo desactivarlos, que no nos rastreen cuando intentemos huir, y tengamos oportunidad-

Se puso de pie, y se acercdo a el.

-No es como que tengamos muchas opciones, si nos quedamos acabaremos siendo maquinas esclavas, o peor... pero si nos vamos... si podemos robar una nave y escapar, podríamos ser libres de verdad!-

>> Escucha hay mas opciones que solo las torii, podríamos vivir por nuestra cuenta yendo de un lugar a otro, las flotas independientes hacen mucho dinero haciendo solo encargos, podríamos ganar suficiente para darnos una buena vida y al mismo tiempo mantener funcionando nuestros componentes biomecanicos!-

—Es lo más loco que me tocó escuchar esta semana.

Entonces, recordó la razón por la cual debía terminar de deschabar toda esa tramoya y bajó la mirada.

—Pero con huir no solucionaremos nada. Hay que llegar hasta el fin con esto. Debemos saber, descubrir la verdad, no solo por Universal, sino por todos los demás… Si están aumentando la producción de armamento, eso significa que están preparando un conflicto.

-Nadie nos va a creer, y lo que es peor, solo nos delataremos-

Se volvio a echar para atras.

-A menos que... pidamos ayuda a la Genesis-

Pensó que si conseguia informacion mas comprometedora podia conseguir la intervencion de la Genesis, y posiblemente evitar lo que sea que estuvieran planeando, o en el peor de los casos salvar a todos los que pudiera.

— ¿Y crees que en la Génesis son unos santos? Justamente darles cierta información que nosotros tenemos, provocará el efecto contrario: Que se pongan a la defensiva y terminen volando todo por los aires gracias a la tecnología que le dieron los Gulliver. Como te he dicho antes… un día se levantan con el pie izquierdo y ¡ZAS! Bye bye. Total, matarnos a todos sería lo mejor, pues no deberían lidiar con personas como nosotros… No son tontos, saben que estos implantes logran hacer maravillas. Mira, yo puedo hackear computadoras, intervenir cámaras filmadoras, pinchar líneas de teléfono entre mil huevadas más, pues no solo porque el implante me lo permite, sino porque tengo conocimientos que me permiten sacarle el mayor jugo posible a esta basura que me metieron en la cabeza ¿Piensas que ellos no se imaginan que existe cosas así? Actuarán como animalitos asustados.
>>Si no morimos por la mano de Universal, será por Génesis. No hay muchas opciones… y seguir con la causa es mejor que huir o desistir.
>>Yo me prometí que iba a ir hasta las últimas consecuencias, aun si todos deciden darme la espalda o tener que dormir en una silla días enteros por estar toda la noche trabajando...

Su firmeza era tal que no pensaba doblegarse ante nadie. No tenía miedo.
Y aunque sus motivos eran secretos, eso no lo desanimaba.

-Entonces que es lo que propones?- Estaba claro que eso lo habia fastidiado. -Las opciones son pocas... y yo no pienso convertirme en una de esas cosas-

>> Van tienes que ser realista, solo somos un par de don nadie, tenemos solo una semana o dos para que empiecen a ponernos estas cosas, ni siquiera estamos seguros de poder salvarnos a nosotros mismos... como crees que podriamos salvar a alguien mas?-

— ¡Todo va a salir bien! ¡Todo va a salir bien!— Repitió muy nervioso— Tan solo debo pensar. Algo se me va a ocurrir… estoy seguro que algo bueno pasará. Tengo un presentimiento.

Se paró de la silla y con el movimiento de una mano, aparecieron todos los íconos del escritorio.
Llevó su mano hacia el arete de su oreja, y lo estiró, y del cual salió un cable que iba aumentando en longitud a medida que más lo jalaba. Metió el arete en una entrada que tenía la computadora de escritorio, como si fuera una especie de USB.
Mandó unos archivos de su cabeza hacia la computadora.

—Un día te voy a contar de porque estoy tan seguro de esto… Tal vez sea un sueño, pero quiero eliminar todas estas estupideces de una vez por todas... Y lo haré. No importa cuan don nadie pueda ser. Tomaré eso como una ventaja.
>>Alguien una vez me dijo que no me diera por vencido ni aun vencido. Y eso es lo que haré. Ya verás, ya verás...

Seguía siendo entusiasta a pesar de todo.

— ¡Mi techo!— Se escuchó la voz del vecino de abajo— ¡Mocosos de mierda!

-Pues tengo mis dudas...- Se puso de pie, para ver por el agujero que había quedado en el suelo.

-Tengo que irme... intentare conseguir toda la información que pueda, pero realmente la única opción en la que parece que podemos salir con vida es escapar por nuestra cuenta.-

Vanderveer suspiró. Cuando sacó el arete de la entrada, el cable se metió solo por el lugar donde había salido.

—Ven en unos días. Tendré que arreglar el suelo y seguir estudiando “eso” y no terminar incendiando todo en el intento.

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Milly estaba emocionada por haber salido del enclaustramiento al que estaba sometida en la base por no obtener trabajo alguno. La verdad es que se la pasaban rascando el ombligo hasta que a algún ricachón se les ocurría contratar sus servicios.
Volar por el espacio hasta la flota Universal la relajaba. Lo único malo es que debía permanecer en Universal esos cinco días… y odiaba Universal. Por lo menos la acompañaría Flare, para matar el tiempo; después de todo, allí la comida era horrible y tenía que entretenerse con alguien para ignorar el hambre.

Geraldine iba en una nave aparte que había alquilado, muy parecido al avión del siglo XXI, descansando. No había podido parar de pensar en todo lo que había ocurrido… estaba más centrada en eso que en su trabajo.

Cuando por fin llegaron a destino, el piloto lo anunció.

—Como odio los viajes interestelares…— Comentó a su mánager, algo fastidiosa.

—Entonces cancelemos la conferencia de prensa— Sugirió el hombre.

— ¿Cuántas veces he de repetir quien soy yo?— Sonrió altanera. Para ese entonces ya habían bajado y estaban dentro de Universal. La voz del parlante le dio la bienvenida a la “Galactic Bunny”. Puso su sonrisa más confiada y se abrieron las puertas, mostrando a los periodistas con sus cámaras. Los flashes la invadieron.

Todo eso lo pasaban por la TV en vivo.

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Una vez que Geraldine dio una breve conferencia de prensa, en donde le preguntaron por ese famoso beso y por el joven, fue hacia el hotel más lujoso de la ciudad en limusina.

Ya tenía todo planeado lo que haría para sacarse a su representante de encima. Ahora solo le quedaba ver que ropa iba a usar para fugarse y para que no la reconocieran.

Se tocó el cuarzo del arete.

—Tú me darás suerte y me ayudarás a encontrarlo…

Durante ese par de dias Sven se las arreglo para escudriñar entre los archivos mas antiguos de la Universal, de cuando la nave era mas pequeña y simple, sin tanta industrializacion.

Habia un detalle que le llamaba la atencion, rl edificio central habia sido en el pasado el centro de mando antes de convertirse en un edificio de archiveros y oficinas, y lo mas importante; era una nave capas de desacoplarse y despegar a travez de una compuerta que habia en el domo, llevandose consigo de ser necesario a toda la tripulacion, casi 2000 pasageros.

Le envio los planos a Van, aunque no habia recibido mantenimiento en varias decadas aun seria capaz de despegar, quizas esa seria la opcion que necesitaban.

Se mudo de vuelta a su departame to de civil, con todo lo que estaba pasando preferia pasar el menor tiempo posible en el cuartel, ademas de que si Geraldine lo buscaba en un directorio esa era la direccion que iba a encontrar,

El departamento estaba en los ultimos pisos de un alto edificio junto a la planta de reciclaje de aire, el lugar donde era mas facil respirar en toda la Universal, pero a su vez el mas alejado de la industria y por lo tanto de cualquier lugar de entretenimiento.